Hoy es dos de enero.

Confieso que no sé porqué es que el mundo lleva 2015 años de existir. Ya sé que depende del año en que nació el chamaquito Jesús, y toda la empresa de imperialismo cultural que representa; pero lo que no sé es porqué el primero de enero es el primero de enero, si el chamaco nació el 24 de diciembre, según. 

Probablemente sean motivos astronómicos, puesto que la ciencia es el amo y señor de la verdad en nuestros tiempos, pero no veo porqué seguir esa jugada si yo no quiero creer en la ciencia. Por ello, he decidido que en este universo de mi blog el tiempo se ordenará a partir de mi nacimiento, que fue un 3 de enero de hace 27 años. O sea que, hoy, es dos de enero.

Me parece que comenzar el año, el 27, es suficiente motivo para plantearme cómo he vivido hasta ahora y qué es lo que quiero cambiar, esto es, y para no hacer el cuento más largo, hacerme unos propósitos de año nuevo para ver qué tal me va en la vida en virtud de lo que hoy día se me ocurre que debería cambiar. 

En el pasado mi orgullo cegador me había hecho creer que todo iba muy bien -y quizás, en efecto, todo iba muy bien- pero después de 27 años como que me siento más humano, y por ende, más feliz, menos perfecto, como con una sonrisa retorcida, y me doy cuenta que necesito propósitos, no uno, varios. Que esta entrada sea la hoja de contrato a partir de la cual me juzgue en un año.

1. Dejar de masturbarme en la medida de lo posible.

¡Qué difícil eh! Siendo un león sexualmente retraído cuando joven -por razones en las que ahondaremos luego- mi nacimiento sexual no sólo estuvo de la mano del onanismo, sino que encontré en este la única caricia narcisista que necesitaba. Aunque me guste asustarme de pensarlo, creo que no soy del todo narcisista, y he buscado eventualmente salir a conocer los placeres sexuales lejos de Manuela. Sin embargo, debo decir, que después de tantos años a su lado, se me hace difícil muy difícil dejarla, al punto que creo que "mi vida sexual"- dícese de aquella en la que le soy infiel a Manuela - no es como debería de ser, y yo quiero serle un gran infiel, por ende, debo de lanzarme a un mundo donde el ritmo de mi verga se acople mejor a las manos de una mujer, no a mi propia mano. Quiero mejorar eso de mi vida en pareja y también quiero que, como en "40 días y 40 noches" la abstinencia me vuelva más propenso a la creatividad sexual.

2. Dejar facebook al menos 6 meses.

Algo similar pero en el rubro de las relaciones sociales. Me da la impresión de que Facebook ha operado en mi dos cosas:

a) Por un lado, me ha vuelto adicto a una vida social fantasmática. Todo aquello que no soy ni hago en el mundo "real", voy y lo hago en un pedazo de bits que a nadie le importan. Llevo hasta el momento 5 días sin facebook y el deseo de postear algo divertido, original, contestatario o reafirmante se encuentra con el vacío de no tener donde hablarlo. ¿Qué pasará con toda esta energía acumulada, para qué buenas cosas podré utilizarla?

b) En consonancia con lo anterior, veo que los años pasan y no he hecho nada productivo cuando, creo, tengo bastante potencial. Estar abrumado en Facebook no hace de mi mas que, como diría Foucault, un cuerpo dócil. ¿Qué clase de rebelde tiene facebook?

3.  Dejar el alcohol gradualmente.

Una simple estadística; cuando entré a la Uni comencé a tomar sistemáticamente todos los fines de semana, siendo ya casi 10 años de aquello. Contaré 10 porque aveces he tomado en días entre semana, bastantes veces. Si el año tiene 52 semanas estamos hablando de que desde hace diez años he tomado alcohol en 521 ocasiones, al menos 3 copas por ocasión (y es estar diciendo muy poco si pensamos el modo de vida que he llevado este año), lo que da un total de 1563 copas que mi cuerpo ha tenido que resistir. La verdad yo lo subiría a 2000 mínimo, lo cual, creo, no está nada bien y me puede estar pasando factura ya mismo. Mi meta es tomar no más de 2 copas por semana, y el objetivo es evitar en la medida de lo posible embriagarme. 

4. Comer bien y hacer ejercicio.

Con los años he generado una disciplina para hacer ejercicio. Sin embargo, creo que ya no lo disfruto como antes. Nunca he logrado eliminar la sensación de panza (no tengo panza pero aún la siento) y pienso que mi rutina, aunque me ha llevado a buenos resultados en el aspecto visual, estos no se sienten tan bien. Quiero conectar lo que como con lo que hago para no sólo verme bien, sino sentirme bien. No tener miedo a hacer ejercicio por estar "quemando más de lo debido" o a comer por "tener un excedente de alimento", hasta el momento esa vida no se ha sentido tan bien. El martes visitaré al diego, un amigo nutriólogo, para que me ayude con eso.

5. Mejorar mi boquita.

Tuve una endodoncia y mis dientes podrían verse mejor, creo que me desmerecen demasiado, debo hacer algo con ello. Mañana mismo llamo para hacer cita con la odontóloga.

6. Jar-8-

Lanzar mi marca de trajes de baño. Este es un proyecto del que hablaré más adelante.

7. Tesis

Acabar mi tesis e ir a hacer investigación de campo a diferentes playas de México. Hacerla con pasión, vivir la aventura.  Que mi trabajo sea bueno y legible, dar una buena impresión con él. Hablaré más de esto después.

8. Casarme.

Y que la boda sea inolvidable.

9. Definir un plan de crecimiento económico.

Que puede venir aunado a un nuevo trabajo, a mi negocio, o a lo que resulte.

10. Finalmente, conocer más gente haciendo cosas que me gustan, teniendo a la verdad y no a "lo que se quiere proyectar" como cómplice.

Dejar FB tendría que abonar a encaminar mi energía a lo que me gusta, lo que, espero, me llevará a conocer más gente afín a mi, es mi deseo este 2015.

Son sólo 10, pero son 10 que no son fáciles de cumplir. Quiero cumplirlos.